Los diferentes tipos de vino

En el mercado encontrarás diferentes tipos de vinos. Estos pueden variar dependiendo de diversas características, siendo el color una de ellas. Teniendo en cuenta este factor, encontrarás tres tipos: blanco, tinto y rosado.

Vino blanco

El vino blanco se elabora principalmente con uvas blancas, aunque en algunos lugares se pueden usar variedades tintas. Es un tipo de vino que se elabora en ausencia de hollejos, es decir, que solo se fermenta el mosto. En cuanto a su color, suelen ser amarillos, verdosos, dorados o pálidos.

Los vinos blancos, además, pueden dividirse en tres categorías principales. Uno de ellos son los secos y vivaces, que no tienen dulzura. La segunda categoría son los secos de cuerpo pleno y la tercera los semisecos.

Vino tinto

El vino tinto se elabora utilizando uvas tintas o azuladas y su color rojo característico se produce luego de que el jugo incoloro entra en contacto con el hollejo de la fruta. Los tonos de este vino varían mucho, pudiendo ser rojos, rubí, púrpura o rojo pálido.

 

Así como el vino blanco, en el tinto también hay varios estilos. Por un lado, están los vinos ligeros de cuerpo, que son afrutados y sin mucho tanino. También están los de medio cuerpo, que destacan por ser moderadamente tánicos. Y por otro lado están los tintos de cuerpo pleno.

Vino Rosado

El vino rosado también se elabora con uvas tintas, pero su color no es tan intenso como el del vino tinto. Esto sucede porque en este caso el jugo de la uva entra en contacto con los hollejos por poco tiempo, de manera que así se consigue un vino rosado según lo que quiera el enólogo.

Este vino también tiene varios estilos. Uno de ellos es el “Blush”, que es un vino dulce. También están los vinos Rose, que pueden ser ligeramente dulces o secos. Los vinos rosados se caracterizan por tener un buen nivel de acidez, por ser frescos y frutales.

 

David Mejias : Asesor de La Vinoteca Motril